Por Emilio Carrillo.
Toda experiencia, por más dolorosa que parezca, tiene su sentido profundo, su por qué y para qué, ese sentido profundo y ese por qué y para qué está siempre relacionado con tu proceso de CONSCIENCIA evolutivo.
En vez de aprender todo lo que se puede de esa experiencia, las personas generalmente solo etiquetan la experiencia como dolorosa o mala y la rechazan.
Al rechazar la experiencia aunque la estés viviendo, es como si no la vivieras, porque no la estás realmente experimentando; LO IMPORTANTE NO ES LA EXPERIENCIA, SINO CÓMO ESTAS VIVIENDO LA EXPERIENCIA.
Si tienes la experiencia delante de tí y en vez de aceptar lo que sucede y vivirlo desde la aceptación, tratando de encontrar el sentido profundo y el mensaje detrás de la vivencia, la rechazamos, la experiencia vuelve una y otra vez.
Tienes que vivir las experiencias que te da la vida, vivir lo que suceda SIN RESISTENCIA.
Sea lo que sea que estés viviendo, si tienes el valor de tomar el toro por los cuernos y vivir esa experiencia tal y como es ya no la vuelves a vivir.
Pero para ello tienes que encontrarle el sentido profundo a las experiencias que tienes por delante.
Cuando integras la soledad, el dolor, el abandono, la depresión, y en vez de resistirte, lo abrazas y lo vives con valor, rompes con la cadena continua del samsara y de los karmas de repetir las mismas experiencias una y otra vez.
Es imprescindible que ACEPTES la experiencia.