(Extractos).
Lo principal es que el cambio solo puede pasar dentro de ti.
No hay que esperar que otras personas también cambien, o esperar, o decir: “no puedo cambiar a no ser que una persona cercana a mí también cambie”. Lo importante es responsabilizarte de tu propio estado de consciencia y permitirle a las otras personas (especialmente las cercanas a ti) que estén donde están, y no exigirles algo que está pasando en tu interior, debido a que, tú estás empezando a cambiar, (es decir), no exigir que otros deban cambiar también. El cambio no aparece en otros intentando que cambien.
La forma más potente de producir un cambio en los demás no es intentando producir un cambio en el otro, sino aceptar al otro completamente tal como él o ella es. Eso es absolutamente vital… le das a la otra persona completa aceptación.
Parte de ese cambio que está ocurriendo en nosotros, es que nos salimos de la mente crítica que continuamente juzga al otro. Nos salimos de eso y somos capaces de aceptar simplemente, a la pareja, al amigo cercano, a un miembro de la familia, a un pariente. Ahí es donde están (ellos) ahora mismo, todavía están yendo a través de sus viejos patrones de conducta. Lo que ha cambiado es que, tu ya no estas resistiéndote a sus patrones y reaccionando a ellos y mediante la reacción, reforzando sus patrones. Ya no tomas parte en ese juego (…)