Consejos de la ma­dre Teresa de Calcuta comentados por Wayne Dyer

1. A menudo pensamos que los demás son irrazonables, ilógicos y egoístas. Perdónales de todos modos. En tu corazón el perdón es como un agente limpiador para tu campo de energía. 

Cuando observes una conducta de baja energía en otra persona, en lugar de permitir que ello afecte a tu entorno inmediato y lo infecte envíale una callada bendición y no te dejes llevar a su baja energía. Cuando perdonas a los demás, estás eligiendo no dejarte influir de manera negativa.

2. Si eres bondadoso, quizá los demás te acusen de tener motivos egoístas. Sé bondadoso de todos modos. 
 
Tu campo de energía está protegido de la contaminación por la bondad. Una vez que eres independiente de las acusaciones de los demás, eres incapaz de enojarte o sentirte dolido por lo que los otros dicen de ti. Sé bondadoso por ti mismo, no por las reacciones que quieres obtener de los demás. La bondad que procede de tu corazón bastará para impedir que te arrastren a un campo de energía contaminado por las falsas acusaciones.

3. Si tienes éxito, te ganarás algunos falsos amigos y algunos verdaderos enemigos. Ten éxito de todos modos. 

El mundo está lleno de personas que buscan la ocasión de ofenderse. Tu éxito en cualquier cosa es suficiente para provocar semejante reacción en los demás. Mantén limpio tu campo de energía concentrándote en lo que sabes que es tu divino propósito y, cuando lo hagas, el universo te apoyará y sostendrá con lo que se llama éxito. Los otros se sentirán ofendidos, pero si insistes en pasar por alto sus reacciones, no permitirás que la presencia de falsos amigos o verdaderos enemigos afecte a tu vida.

4. Si eres honrado y franco, los demás puede que te engañen. Sé honrado y franco de todos modos. 

Tu campo de energía no se contaminará si sabes que estás siendo honrado y franco. Esto puede hacer que otras personas, que están en las energías inferiores de la falta de honradez y el engaño, intenten aprovecharse de ti. Pero no serás víctima de ellos porque tendrás esa paz interior que caracteriza a la energía superior y más rápida. Los que intenten engañarte respetarán tu posición cuando actúes según tus valores espirituales. Actúa con los demás desde tu yo más elevado y, a la larga, estarás libre del miedo a ser engañado. Irónicamente, cuando ese miedo desaparece también lo hace el problema de resultar engañado.

5. Lo que te ha costado años construir, alguien lo puede destruir de la noche a la mañana.Construye de todos modos. 

No construyas nada sólo con el fin de terminarlo. Construye porque es tu manera de expresar tu propósito. Cuando te comes un plátano, la meta no es terminarlo, sino disfrutar cada bocado mientras te alimentas. Construir algo es una manera de expresarse. Si alguien cogiera todos los libros que he publicado y los destruyera, seguiría escribiendo. Si se destruyeran todas las cintas de mis conferencias, seguiría dando conferencias. Todo lo que se construye en el mundo material a la larga será destruido. No construyas con miedo a que se destruya, sino para dar expresión al espíritu infinito que llevas en tu interior.

6. Si encuentras la serenidad y la felicidad, puede que los demás sientan celos. Sé feliz de todos modos. 

Siempre me recuerdo a mí mismo que no hay un camino que lleve a la felicidad. La felicidad es el camino. Si buscas en las reacciones de los demás una confirmación de tu forma de ser, los estarás convirtiendo en la fuente de tu felicidad. La felicidad es una tarea que se hace desde dentro. No la obtienes de nadie ni de nada; la das a todos y a cada suceso de tu vida. Mantén tu campo de energía libre de contaminación recordando que tú eres quien lo limpia. Los demás pueden estar celosos, encontrarte defectos y decir cosas terribles de ti pero eres libre de elegir la felicidad para ti de todos modos. La consecuencia de tu respuesta es que poco a poco influyes en sus campos de energía de los celos y la mezquindad con la felicidad que irradias.

7. El bien que haces hoy a menudo los demás lo olvidarán mañana. Haz el bien de todos modos

Igual que ser feliz, hacer el bien es algo que constituye la expresión de tu esencia espiritual invisible. Deja de buscar la aprobación y gratitud de los demás para hacer el bien. Aunque nadie te dé las gracias, haz por los demás lo que tu corazón te dicte desde el espíritu, que está arraigado en la energía más rápida del amor, ia bondad y la conexión a todo. Tu espíritu te insta a expresar la energía del corazón. El ego, arraigado en el mundo material, te insta a hacer lo que haces para que seas recordado y gratificado come si la vida fuera un concurso. 

Escucha a tu espíritu. Acuérdate de dar amor y hacer el bien porque tú eres así y no por otras razones.

8. Da al mundo lo mejor que tienes y puede que jamás sea suficiente. De todos modos, da al mundo lo mejor que tienes. 

Cuando la madre Teresa habla de «lo mejor» se refiere a tu yo más elevado y sagrado. O sea, la energía vibracional más rápida y la fuente de la solución de todos los problemas. Los demás quizá intenten contaminar tu campo de energía exigiendo más de ti, o criticándote repetidamente, o incluso haciendo caso omiso de tus esfuerzos. Cuando regresas a tu yo más elevado, te libras de esas opiniones casi al instante y dejas de sentirte falto de aprecio. Entrega tu espíritu al mundo y aléjate del resultado de tus esfuerzos y tu campo de energía estará cada vez menos contaminado.

Estos son los ocho consejos que la madre Teresa de Calcuta ofreció como plan para tu vida. Su conclusión es la esencia verdaderamente profunda de este ofrecimiento: «Al final, todo es entre tú y Dios; nunca ha sido entre tú y ellos».


EL ANÁLISIS FINAL

A menudo los demás son irrazonables, ilógicos y egoístas; 

Perdónales, de todos modos.

Si eres bondadoso, quizá los demás te acusen de tener motivos egoístas;

Sé bondadoso de todos modos.

Sí tienes éxito, te ganarás algunos falsos amigos y algunos verdaderos

enemigos; 

Ten éxito de todos modos.

Si eres honrado franco, los demás puede que te engañen; 

Sé honrado y franco de todos modos.

Lo que tardas años en construir, alguien lo puede destruir de la noche a

la mañana: 

Construye de todos modos.

Si hallas la serenidad y la felicidad, puede que los demás sientan celos; 

Sé feliz de todos modos.

El bien que haces hoy, a menudo los demás lo olvidarán mañana; 

Haz el bien de todos modos.

Da al mundo lo mejor que tienes, y quizá nunca será suficiente;

Da al mundo lo mejor que tienes de todos modos.

Al final, todo es entre tú y Dios;

Nunca ha sido entre tú y ellos, de todos modos.