Cierto día, un profesor entró en el aula y le dijo a los alumnos que se prepararan para una prueba relámpago.
Todos se ubicaron en sus asientos aguardando asustados el examen. El profesor fue entregando las pruebas con el texto hacia abajo. Después que todos recibieron la prueba pidió que le diesen la vuelta a la hoja. Para sorpresa de todos no había ninguna pregunta.
Sólo una mancha negra en el centro de la hoja.
El profesor viendo la expresión de sorpresa de los alumnos les dijo:Ahora ustedes van a escribir un comentario sobre lo que están viendo.
Todos los alumnos confundidos comenzaron entonces la terrible e inexplicable tarea.
Terminado el tiempo, el maestro recogió las hojas, se puso al frente de la clase y comenzó a leer las redacciones una a una en voz alta.Todas sin excepción, definían la mancha negra intentando dar explicaciones por su presencia en el centro de la hoja.
Terminada la lectura el profesor comenzó a explicar: Nadie en el aula ha hablado de la hoja en blanco.
!Todos centraron su atención en la mancha negra¡
!Todos centraron su atención en la mancha negra¡
Esto sucede en nuestras vidas. Tenemos una hoja en blanco entera para observar y aprovechar, pero siempre nos centramos en las manchas. La vida es un regalo que debemos mimar con mucho cariño y cuidado.
¡Siempre tenemos motivos para celebrar!
La son mínimas en comparación con todo aquello que tenemos diariamente. Pero son las manchas negras las que pueblan nuestra m
Quita los ojos de las manchas negras de tu vida. Disfruta cada instante. ¡Cada momento que nos da la vida!