Bondad y excelencia


Ludwig van Beethoven: No conozco ningún otro signo de superioridad que la bondad

Pío Baroja ‘No me admira el ingenio, porque se ve que hay muchos hombres ingeniosos en el mundo. Tampoco me asombra que haya gente con memoria, por grande y portentosa que sea, ni que haya calculadores; lo que más me asombra es la bondad, y esto lo digo sin el menor asomo de hipocresía.



Howard Gardner: En un momento dado empezó a preguntarse ‘por la ética de la inteligencia y por qué personas consideradas triunfadoras y geniales en la política, las finanzas, la ciencia, la medicina u otros campos hacían cosas malas para todos y, a menudo, ni siquiera buenas para ellas mismas’.  ‘En realidad, las malas personas no pueden ser profesionales excelentes. No llegan a serlo nunca. Tal vez tengan pericia técnica, pero no son excelentes… Lo que hemos comprobado es que los mejores profesionales son siempre ECE: excelentes, comprometidos y éticos… 

No alcanzas la excelencia si no vas más allá de satisfacer tu ego, tu ambición o tu avaricia. Si no te comprometes, por tanto, con objetivos que van más allá de tus necesidades para servir las de todos. Y eso exige ética… Sin principios éticos puedes llegar a ser rico, sí, o técnicamente bueno, pero no excelente’. 





‘la mayor creación de la inteligencia es la bondad’.