El bicarbonato fue muy popular en su momento pero se fue dejando
de lado y olvidando hasta que se han descubierto su gran efectividad para
combatir muchas enfermendades además de sus clásicos usos:
· Se usa
en productos de belleza y productos de baño.
· Frotado
sobre el cuero cabelludo ayuda a eliminar la caspa.
· Estupendo
para mantener unos dientes blancos.
· Agregado
al agua del baño elimina el olor a sudor.
· Mezclado
con agua, formando una pasta, puede ser un estupendo exfoliante.
· Ideal
en caso de acidez estomacal.
· Alivia
el escozor causado por las picaduras de los mosquitos y abejas.
· Añadido
al agua del baño aliviara las quemaduras producidas por el sol.
· Para
eliminar los hongos de los pies, se aplica una pasta formada por bicarbonato
sódico y agua.
· Está recomendado para combatir la inflamación de las encías y las aftas bucales.
· Combate
el mal aliento.
Además de todos estos beneficios del
bicarbonato sódico, los científicos están investigando
otros usos terapéuticos relacionados con la lucha contra el cáncer y las
enfermedades renales.
Nuestros cuerpos albergan una gran cantidad de bacterias y hongos que
viven, crecen y sobreviven en armonía cuando estamos comiendo y viviendo
saludablemente.
Pero pueden volverse altamente dañinos cuando el medio en donde viven
se altera. La alteración de ese medio es fomentada por dietas altas en azúcar o
en hidratos de carbono, también por agua y aire contaminados, o por la
destrucción de nuestra flora intestinal a causa del uso de antibióticos u
otros medicamentos (quimioterapia).
Las bacterias y hongos se alimentan de las mismas sustancias de las que
se alimenta nuestro cerebro. Cuando ingerimos en exceso, alimentos ricos
en glucosa, también estamos alimentando en exceso a las bacterias y hongos que
crecen y se multiplican desproporcionadamente. Esto provoca que el cerebro no
reciba suficiente alimento, y como el cerebro es quien manda, inmediatamente
emite las órdenes reclamando su ración. Allí es cuando sentimos la urgencia de
correr a ingerir algo dulce, o hidratos de carbono (se convierten en glucosa),
o alcohol. Y comienza así el círculo vicioso: al ingerir más, crece la
provisión de azúcares, y con ello crece la multiplicación de bacterias y
hongos, y esa población en crecimiento reclama más alimentos y sentimos la
necesidad de ingerir más, y más, y más, y más….. Pero sucede que así como las
bacterias y hongos obtienen su alimento de nuestra sangre, también vuelcan en
ella sus desperdicios, toxinas que tornan cada vez más ácido el medio y que con
el tiempo llegan a “envenenar” los tejidos. Para poder procesar las toxinas, el
hígado las convierte en alcohol (ácido) y ese exceso de alcohol en nuestro
organismo, nos produce una sensación como la de estar borracho… mareado,
desorientado, mentalmente confundido.
La acumulación excesiva de bacterias y hongos reduce la provisión de
potasio y magnesio del cuerpo con la consecuente reducción de la energía
celular que provoca:
· Fatiga
en exceso
· Reducción
de las fuerzas y la claridad de pensamiento
· Reduce
el entusiasmo, la ambición,
· Produce
la liberación de radicales libres los cuales coadyuvan al proceso de
envejecimiento.
Otros síntomas de acumulación de bacterias y hongos son:
· Ataques
de pánico,
· Ansiedad,
· Depresión,
· Irritabilidad,
· Dolores
de cabeza y en articulaciones
· Inflamación
en vías respiratorias, sinusitis,
· Estrés
glandular y problemas menstruales.
Muchos estudios científicos han coincidido en que las bacterias y
hongos pueden llegar a causar enfermedades cuando se les permite desarrollarse
en un terreno no sano (ácido).
A través de diferentes estudios científicos analizando las células
vivas de la sangre, se han observado formas de bacteria que viven en nuestro
organismo (algunas incluso trabajan ayudando al cuerpo) las que dependiendo del
medio en que se desarrollaban, a veces crecían y se alargaban volviéndose
patógenas. En algunos casos, mutando de “bacteria” a “hongo”. La acidez en el
pH de los tejidos de nuestro cuerpo suele ser el sello distintivo del cáncer y
de otros desequilibrios de la salud tales como: enfermedades cardiovasculares,
problemas cerebro vasculares, patologías del riñón,
trastornos inflamatorios y enfermedades del pulmón.
El investigador Sang Whang, con 50 años de experiencia en el estudio
del balance acido–alcalino, sostiene que: Es el exceso de ácido en nuestro
cuerpo lo que cultiva el cáncer. Y formula los siguientes postulados:
1) Las células saludables son alcalinas.
2) Un ambiente ácido contiene menos oxígeno que un ambiente alcalino.
3) Las células saludables mueren en un ambiente ácido, mientras que las
células cancerosas mueren en un ambiente alcalino.
Sugiere que todo tratamiento contra el cáncer debería comenzar
cambiando el ambiente ácido a un ambiente alcalino
“La Enfermedad es la expresión de un exceso de ácidos en el
cuerpo humano” Robert O. Young es Doctor en Medicina, Microbiología y
Nutrición, lleva 30 años realizando análisis de sangre viva y seca, y su
investigación sobre el cáncer ha sido validada por un estudio científico
británico, sostiene que: “Nuestro organismo fabrica y utiliza bicarbonato de
sodio como un sistema natural para mantener el diseño alcalino para prevenir la
degeneración del tejido “.
“La hiper-alcalinización de los tejidos corporales con bicarbonato de
sodio es la manera más segura, eficaz y natural para frenar cualquier condición
cancerosa y muchas enfermedades y procesos inflamatorios más”
El Dr. Robert Young manifiesta: “Durante años he observado el impacto
que provoca lo que ingerimos en el delicado balance del pH de nuestra sangre. Y
a través de mis investigaciones he comprobado que la combinación de 4
maravillosas sales de bicarbonato (sodio, magnesio, potasio y calcio) ocurre
naturalmente en todos los fluidos de un cuerpo sano, con el propósito de
mantener el balance alcalino-ácido natural y actuando como anti-oxidantes que
retardan el proceso de envejecimiento.
Una adecuada provisión de estas cuatro sales de bicarbonato es la mejor
protección contra el envejecimiento y toda enfermedad, incluyendo el cáncer,
además de que mejoran el rendimiento atlético y al mejorar la salud en general,
logran mejorar también el estado de ánimo y las energías.
Para frenar el envejecimiento y recuperar la salud es necesario
revertir el daño del ácido en las células mediante una dieta alcalinizante. Es
hora de hacer los cambios necesarios en nuestro estilo de vida para que nuestro
cuerpo vuelva a un estado de balance y armonía. Puede beber un litro de agua
por día a la que le haya agregado una cuchara sopera de bicarbonato de sodio.
Esto ayudará a enjuagar su sistema y a liberarlo de la acidez acumulada.
Para revertir casos de neumonía, asma, sinusitis, haga nebulizaciones
de agua con dos gotas de bicarbonato de sodio líquido, 2 o 3 veces por día.
Para prevenir la acumulación de bacterias en la boca, haga buches con una
mezcla de una cucharada de té de bicarbonato de sodio en un vaso de agua. Para
eliminar los residuos de químicos de su cabello, agregue una cucharadita de
bicarbonato de sodio a su frasco de champú. Para contrarrestar los efectos de
una ingesta ácida, beba antes o después de la misma, un vaso de agua con una cucharada de té de bicarbonato
de sodio. Cuando se ha abusado
del alcohol tomar dos cucharaditas en un vaso con agua, rehidrata y calma
sus efectos.
Es desodorante, realiza una acción de barrera que impide la expansión
de malos olores procedentes de sustancias volátiles ácidas o muy básicas.
Para prevenir y eliminar bacterias en la boca podemos enjuagarnos
con un vaso de agua y una cucharada pequeñas de bicarbonato.
Alivia la irritación y comezón producida por las picadas de mosquitos y
abejas. Disolver una cucharadita en un vaso de agua, mojar un trapo limpio y
colocarlo sobre la picada, 15 ó 20 minutos.
Para los resfriados, gripe, bronquitis, tos, garganta inflamada,
podemos tomar una cucharadita tres veces al día en medio vaso de agua, durante
tres días seguidos, funciona! De los remedios caseros para estos trastornos es
uno de los más prácticos.
Poner una cucharadita de bicarbonato de sodio en su frasco de champú
eliminará la parte de dañina de los químicos que contenga.
Antes de tomar bicarbonato de sodio consulta con el médico si:
· Si tomas otros medicamentos, especialmente otros antiácidos,
aspirinas o similares, hierro, litio, metenamina, metotrexato, quinidina,
antibióticos que contienen sulfa, tetraciclina o vitaminas. Tomar el
bicarbonato de sodio al menos 2 horas antes o después de haber tomado otros
medicamentos.
·Si tienes hipertensión, insuficiencia cardíaca congestiva, o
enfermedades del riñón o si has tenido hemorragias en el estómago o en los
intestinos.
·Si estás embarazada,
o tienes intención de quedarte embarazada o si estás amamantando.
· Si se sigue una dieta baja en sodio, ya que su consumo aumenta la
cantidad de sodio en el cuerpo.
“Si logramos mantener nuestro cuerpo con un pH alcalino entre 7.3
y 7.4 nos mantendremos libres de enfermedades” Dr. Robert O. Young