Jin Shin Jyutsu se engloba dentro de las terapias que se basan en la existencia de una energía vital, considerada una manifestación de la energía universal que penetra en todo lo existente y representa la fuerza de la vida. Esta energía, que circula por todo el cuerpo en diferentes niveles o profundidades, debería fluir libre y sin obstáculos, ya que su bloqueo puede generar tensiones que lleven a la desarmonía y la enfermedad.
El cuerpo humano está compuesto de energía y materia en perfecto equilibrio, si este equilibrio se desestabiliza por cualquier motivo (accidentes, traumas, forma de vida, enfermedad, actitudes, preocupaciones, miedo, cólera, tristeza, alimentación inadecuada, el estrés, intentar ser quienes no somos...), el cuerpo humano se ve inmediatamente afectado con síntomas más o menos claros o visibles. Cuando el sistema energético está en armonía la persona lleva una vida feliz, y sana. Si el sistema energético se desequilibra o desarmoniza, el cuerpo físico comienza a sentir el efecto, produciendo problemas de salud a nivel emocional o mental.
El cuerpo humano está compuesto de energía y materia en perfecto equilibrio, si este equilibrio se desestabiliza por cualquier motivo (accidentes, traumas, forma de vida, enfermedad, actitudes, preocupaciones, miedo, cólera, tristeza, alimentación inadecuada, el estrés, intentar ser quienes no somos...), el cuerpo humano se ve inmediatamente afectado con síntomas más o menos claros o visibles. Cuando el sistema energético está en armonía la persona lleva una vida feliz, y sana. Si el sistema energético se desequilibra o desarmoniza, el cuerpo físico comienza a sentir el efecto, produciendo problemas de salud a nivel emocional o mental.

Si uno o varios de estos circuitos son bloqueados, la corriente energética del área respectiva comienza a interrumpirse, causando finalmente un desequilibrio en toda la interacción energética del organismo. Como consecuencia, la enfermedad aparece y comienza a manifestarse a través de sus diferentes síntomas.

Las técnicas energéticas ponen en orden el sistema de energía, normalizan el flujo de la energía y crean un camino para el despertar del conocimiento, de la armonía completa dentro de uno mismo y del universo.